Mecenas del Renacimiento

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Departamento de letras – Jornada nocturna.
L4.02 Literatura europea (española) del Renacimiento.
Dr. Mario René Dardón.
PEM en Lengua y Literatura.
Krizia Ivone Barrios Gómez, Carné: 201402490





Mecenas del Renacimiento




Definición de mecenas y mecenazgo

Según la Real Academia Española (RAE) Mecenas, C. 69 – 8 a. C., consejero del emperador romano Augusto y protector de las letras y los literatos. Persona que patrocina las letras o las artes.
Cayo Cilnio Mecenas, un importante noble romano del siglo I a.C., era un personaje popular y muy unido a la clase política de la época, tenía una relación muy estrecha con César Augusto, que sería el primer Emperador Romano. Muy interesado en la cultura y sobre todo en la literatura, apoyó económicamente a muchos de los más importantes artistas de la época de los que destacaban los poetas Horacio y Virgilio. (García, 2014).
Las acciones de Mecenazgo ayudan a mejorar la reputación de las organizaciones que las realiza, llegando a convertirse en una acción de relaciones públicas. Se encargaban de proteger a los artistas y financiaba sus obras. El mecenazgo apareció en el Renacimiento y aunque los artistas no recibían un pago por el trabajo inmediatamente, pero sí que podían recibir comida y un lugar para vivir con el mecenas, o a veces algo de dinero (Martínez, 2011).
Entre otras de las definiciones, se puede decir que la palabra mecenas hace referencia a aquella persona que, por contar con recursos económicos suficientes, toma bajo su protección a un artista o científico para permitirle realizar su tarea y beneficiarse con ella de algún modo más o menos directo (Bembibre, 2010).
Aunque el mecenazgo existe desde la antigüedad, fue a partir del Renacimiento cuando adquirió su apogeo. Por entonces, poetas, escultores, pintores y otros artistas recibían dinero o apoyo de mecenas para permitirles continuar con su producción creadora. Conocemos los célebres casos de Bernini o Van Dick como artistas apadrinados o el caso del Papa Julio II quien fomentó la cultura en general con su aportación económica a distintos artistas (Navarro, 2017).
El mecenazgo es entonces el establecimiento de este lazo que podría, en ciertos aspectos, ser comparada con la relación de vasallaje que existía en la Edad Media. El mecenazgo existió a lo largo de toda la historia, pero fue un fenómeno muy característico del Renacimiento. Muchos burgueses y aristócratas; principalmente ubicados en las ciudades de Italia, buscaron ser retratados en su importancia y magnificencia en un periodo en el que la representación de Dios y de los elementos cristianos había empezado a perder centralidad. Gracias a la acción y aporte económico de los mecenas, el Renacimiento se transformaría también en un período de alto crecimiento artístico y cultural. (Pérez, 2013)

Los Médici de Florencia.
Entre los mecenas más importantes debemos mencionar sin duda a los Médici, una importante y famosa familia proveniente de Florencia. Con su dinero, los Médici apoyaron el desarrollo del arte y la cultura, de esta forma tuvieron una participación vital y decisiva en el crecimiento del movimiento humanista (Martínez, 2011).
Los logros más significativos de la familia Médici predominaron en el campo del arte y la arquitectura, tanto que los talentos se emplean hoy como referencias principales.
Numerosos integrantes de la misma se convirtieron con gustos en mecenas de artistas que luego serían conocidos mundialmente por su talento. El primer miembro importante de los Médici fue, Juan Cosme de Médici, que funcionó también que pudo tener sedes en las mayores ciudades del continente, como Londres y París. Juan Cosme de Médici se convirtió en los hombres más ricos del viejo continente. Participaba del gobierno y era un mecenas. Con su dinero, apoyaba a la iglesia, escritores, arquitectos y artistas. Para promover la filosofía fundó la “Academia Platónica” en donde los estudiantes podían aprender sobre las obras de los escritores de la Antigua Grecia y debatir sobre diversos temas. A los arquitectos, les sugería que sus construcciones obedecieran el estilo de la Antigua Roma (Aparences, 2015).
Al morir Cosme, su nieto Lorenzo de Médici, fue aún más reconocido. Era llamado Lorenzo “El Magnífico”, ya que con su mecenazgo apoyó alguno de los artistas más famosos de la historia: Botticelli, Miguel Ángel y Leonardo da Vinci. Justamente la época en que Lorenzo apoyó las artes se le conoce como “La época de oro” y es una de las más importantes dentro del mecenazgo, gracias al esplendor artístico alcanzado en la Florencia de fines del siglo XV. Ejemplo de esto es el apoyo a Masaccio y la reconstrucción de la Basílica de San Lorenzo de Florencia. Michelangelo Buonarroti conocido en español como Miguel Ángel, fue un arquitecto, escultor y pintor considerado uno de los mejores en los tres campos. Es considerado la mayor adquisición de Lorenzo El Magnífico. Produjo una serie de obras para distintos miembros de la familia Médici, comenzando con el propio Lorenzo. (Fahrenheit Magazine, 2015)
En la arquitectura, se les debe a los Médici la mayoría de los má bellos edificios de Florencia, como la Galería Uffizi, el Palacio Pitti, los Jardines de Bololi, el Belvedere y el Palacio Médici. Sin el apoyo de esta familia, los artistas más influyentes del Renacimiento no hubieran logrado el impacto que hasta nuestros días sigue estando presente. Otros de los artistas apoyados por ellos están: Donatello, artista y escultor que se convirtió en la fuerza innovadora en el campo de la escultura monumental y el tratamiento de los relieves. Fra Angelico, pintor reconocido por su temática religiosa y la serenidad presnte dentro de sus obras. Filippo Brunelleschi fue el iniciador de la arquitectura de estilo renacentista y romper con el estilo precedentes, la arquitectura gótica.

Los d´Este de Ferrara
Los miembros de la familia Este, en Ferrara y Modena, se encuentran entre los coleccionistas más importantes del Renacimiento, y contribuyeron de forma notable al desarrollo del arte en Italia. Aunque los testimonios más antiguos sobre esta familia datan de época carolingia, los Este fueron conocidos sobre todo por su papel en la política y la cultura del norte de Italia, desde 1250 hasta la época napoleónica. Fueron una familia noble italiana soberanos del ducado de Ferrara e importantes mecenas de las artes durante el Renacimiento, tomaron su nombre del catillo d´Este, cerca de Padua. Lograron a través de las alianzas matrimoniales estar presentes en las decisiones más importantes de este periodo. Los hermanos Isabella, Beatrice y Alfonso.
Isabella d’Este, hija de Ercole d’Este y esposa de Francesco Gonzaga, el mecenazgo en Mantua conoció una segunda edad de oro. Contando con menos recursos que sus antecesores, pero sabiendo hacer uso y a veces abusando de su autoridad, consiguió reunir una serie de objetos de arte sorprendentes, no para la admiración del público, sino para su propio deleite. Entre sus mecenazgo están Rafel Mantegna y Giulio Romano, arquitecto de Mantua, así como a los músicos Bartolomeo Tromboncino y Marchetto cara. Isabella no tenía fortuna personal y ni una extraordinaria belleza. Sin embargo, podía confiar en una amplia red de relaciones, empezando por las de su familia: su padre, Ercole d´Este, era duque de Ferrara y su madre, Leonor de Aragón, era hija de Ferrante, rey de Nápoles. Su hermana Beatrice se casó con Ludovico Sforza el Moro, quien fue señor de Milán hasta 1499. Uno de sus hermanos, Alfonso, se convirtió en duque de Ferrara y otro hermano llamado Hipólito, fue uno de los cardenales más ricos de la Curia. En cuanto a sus hijos, su adorado Federico se convertiría en duque de Mantua y mecenas de Giulio Romano, Ercole sería nombrado cardenal y Eleonora se casaría con el duque de Urbino.
Alfonso I d’Este sucedió a su padre Ercole I como duque de Ferrara, Módena y Reggio. A los 15 años, se casó con Anna Sforza, hija del duque de Milán, que murió de parto, años más tarde se casó con Lucrezia Borgia, hija del Papa Alejandro VI. Las festividades de la boda demostraron una vez más la pompa, el poder y riqueza de la ciudad de Ferrara. Al igual que su hermana Isabella d’Este, casada con un Gonzaga de la Casa de Mantua, a Alfonso le gustaban sobre todo las obras inspiradas en la antigüedad clásica, como parte de un programa de auto-representación. Desde la reestructuración de sus apartamentos personales. El pintor ferrarés Dosso Dossi se convirtió en pintor de la corte de Ferrara en perfecta armonía intelectual con el Ariosto, poeta también de aquella corte erudita. Durante su larga carrera en la corte de los d´Este. Tiziano y Dosso Dossi son los artífices de la fortuna que tuvieron los asuntos profanos en el ducado de los d´Este, incrementado por una serie de alegorías mitológicas a las que también contribuyeron Battista Dossi, Garofalo y Girolamo da Carpi (Aparences).

Los Sforza de Milán
Los Sforza fueron una familia gobernante del Renacimiento, con asiento en Milán. La dinastía fue fundada por Muzio Attendolo, llamado “Sforza” (de sforzare, “ejercer una fuerza”), un condottiero de la Romagna que servía a los reyes angevinos de Nápoles. Fue el dinasta más célebre de los condottieri.
Los Sforza gobernaron en conjunto con los Borgia a través del matrimonio arreglado entre Lucrezia Borgia (hija de Rodrigo Cardinale Borgia, futuro Alejandro VI) y Giovanni Sforza (hijo ilegítimo de Constanzo I, señor de Pesaro). Francesco Sforza va a recibir una ayuda significativa, y no sólo financiera, del banquero florentino y gran mecenas Cosme de Médicis, al que recurre para poner en práctica su programa político y cultural abierto a las ideas innovadoras del clasicismo humanista del centro de Italia. Estas ideas se unirán a las influencias góticas venidas del norte de los Alpes. Aunque no tenía ni la cultura ni el gusto de Cosme de Médicis, sin embargo confió la educación de su hijo a humanistas como Filelfo que celebró sus hazañas en la obra Sforziada, y trató de imitar a Cosme en el campo de la arquitectura, encargando el Ospedale Maggiore de Milán basado en los planos del arquitecto Filarete.
Ludovico Sforza, segundo hijo de Francesco Sforza, se reveló como su más digno heredero. Recibió una formación humanística. En 1491 se casó con Beatrice d’Este, hija de Ercole d’Este de Ferrara y hermana de Isabella d’Este. Su amor por la música, los grandes espíritus y por las espectaculares puestas en escena, explican su generosidad hacia Leonardo da Vinci, con quien compartió su pasión por la ciencia. Gracias a él, Leonardo pintó La última cena para los dominicos de Santa Maria delle Grazie y realizó la decoración de algunas salas del Castillo Sforzesco. Su mecenazgo arquitectónico fue muy brillante: tenía la intención de terminar la Cartuja de Pavía, añadiéndole una nueva catedral. Fueron ampliadas numerosas fundaciones religiosas, comenzando por Santa Maria delle Grazie y San Ambrosio, basándose en los planos Bramante. Su cultura y el esplendor de su mecenazgo fueron alabados por sus cortesanos y hombres de letras quienes, como Castiglione, lamentaron la dispersión (Aparences, 2014).
La arquitectura gótica da paso gradualmente a la arquitectura de inspiración clásica, hasta triunfar con Bramante bajo Ludovico el Moro. Beatrice d´Este, su esposa, tiene un retrato realizado por Giovanni Ambrogio de Predis. Conquistó por sí misa una posición como señora de una de las más espléndidas cortes de Italia al rodearse de hombres cultivados, poetas y artistas como Niccolo da Gorreggio, Bernardo Castiglione, Bramante, Leonardo da Vinci y muchos otros. Entre su mecenazgo y buen gusto se debe en gran medida el esplendor del Castillo de Milán de la Cartuja de Pavía y de muchos edificios famosos en Lombardía. Bajo sus auspicios se construyeron obras maestras del Quattrocento, como Santa Maria de la Gracias de Milán o el Palacio de Ludovico el Moro en Ferrara.

Los Gonzaga en Matua
Con Francisco II trabajó el famoso pintor Andrea Magtegna como pintor de corte y produjo algunas de sus obras más destacadas, es una de las grandes figuras del Quattrocento en Italia. Magtegna se casa con NIcolosia Bellini cuyos hermanos Giovanni Gentile y Nicollò son también artistas.
El primer duque de Mantua fue Fderico II. Claudio Monteverdi fue el compositor para el ducado de Mantua. Guillermo, hijo de Federico II y Margarita de Monferrato, tenía sólo doce años de edad cuando sucedió a su hermano Francisco III. Guillermo era feo y deforme, lo que probablemente contribuyó a la formación de su carácter inquieto, austero y reservado. En el campo de las artes figurativas, a diferencia de su padre, Guillermo prefirió sostener a artistas locales como Lorenzo Costa el Joven, Ippolito Andreasi y Teodoro Ghisi. Hizo modernizar las formas arquitectónicas obsoletas del Palazzo Ducale por el arquitecto Giovan Battista Bertani, con la creación de una galería donde pudieran exponerse el creciente número de estatuas antiguas que se acumulaban en las colecciones de los Gonzaga. El matrimonio entre el duque y Leonor de Austria, hija del emperador Fernando I de Habsburgo, había confirmado el prestigio internacional de la familia Gonzaga.
La ascensión al trono de Vincenzo I a la muerte de su padre, marcó el comienzo de una nueva era para la corte de Mantua: abandonando la política de la prudencia, de consolidación y preservación de las riquezas del estado que había caracterizado el gobierno de su padre Guillermo, Vincenzo comenzó a dotar al pequeño ducado de una dimensión europea, mediante la adopción de un estilo de vida lujoso y refinado, y procurándose los servicios de artistas de renombre internacional. Rodolfo II de Habsburgo, conocido por sus intereses artísticos y gustos de coleccionista, consideraba Vincenzo como un experto, como una referencia absoluta en términos de buen gusto. La influencia ejercida por su esposa Leonor de Médicis, hija de Francisco I de Médicis, Gran Duque de Toscana, fue determinante en la formación de su sensibilidad artística. Leonor había recibido una esmerada educación en el refinado ambiente florentino, formando su propio gusto entre los objetos de arte y las colecciones de la familia, y aprendiendo a negociar con los numerosos artistas que estaban en el servicio de la corte.
Elisabetta Gonzaga, fue reconocida por su cultura y virtud, Duquesa de Urbino por su matrimonio Guidobaldo da Montefeltro. Tiene su retrato hecho por el artista Raffaello Sanzio o como Rafael de Urbino, llamado “Ritratto di Elisabetta Gonzaga, duchessa d´Urbino”. Fue un pintor y arquitecto del Alto Renacimiento, fue inspector de antigüedades, donde se interesó en el estudio y conservación de los vestigios grecorromanos. Es considerado parte del trio de los grandes maestro su época juntamente con Miguel Ángel y Leonardo da Vinci.

Los Borgia en Roma.
Originalmente eran Borja, por su procedencia de origen, pero su grafía fue italianizada siendo más conocidos como Borgia. Fueron una familia valenciana establecida en Játiva reino de Valencia, y posteriormente en Gandía, procedentes de Borja.
Los Borgia fueron mecenas ilustrados que acogieron bajo su protección a grandes artistas del Renacimiento en las distintas cortes italianas con las que mantenían relaciones estrechas. Esta muestra reúne obras emblemáticas de artistas como Miguel Ángel, Leonardo da Vinci, Rafael, Tiziano, Bellini, Della Robbia, Dosso Dossi, Andrea Mantegna, Melozzo da Forlì, Perugino, Pinturicchio, Luca Signorelli y Andrea del Verrocchio. Alejandro VI Borgia subió al trono de Pedro, año en el que se multiplican los hechos históricos trascedentes por las consecuencias que accarrearán. En Italia, la muerte de Lorenzo el Magnífico abre un período de inestabilidad en Florencia. Maquiavelo, que por cierto se dice que se inspiró en Cesar Borgia para su obra El Príncipe, aconsejó dicho modelo. Durante este período, la producción artística en Roma incluye episodios brillantes en el campo de la escultura y la arquitectura, entre ellos la tumbas en bronce de Sixto IV e Inocencio VIII realizadas por Pollaiuolo, las intervenciones en las dos disciplinas, del lombardo Andrea Bregno en Santa Maria del Popolo, el Palacio de la Cancillería comisionado por el cardenal Raffaele Riario o La Piedad de Miguel Ángel.
Lucrezia Borgia, tuvo se hizo mecenas en su tercer matrimonio, con Alfonso d´Este, a pesar de su oscuro pasado (tres matrimonios, un hijo sin padre y la supuesta relación incestuosa con su hermano Cesar Borgia), Lucrezia Borgia fue capaz de asumir un lugar preponderante en la corte de Ferrara, fue instruida en algunas de las materias que se consideraban en aquella época apropiadas para las señoritas de la alta aristocracia; es decir: arte, música, literatura, latín y danza. Y adopto las costumbres de los d´Este, sobretodo de Isabella, su cuñada. La actividad de mecenazgo de los Borgia fue muy importante y alcanzó a artistas tan famosos como Miguel Ángel, Pinturicchio, Bartolommeo Veneto, Tiziano o el Bosco, quienes fueron protegidos en algún momento de su vida artística por los Borgia. A esta protección debemos algunas de sus obras más conocidas. El mecenazgo más importante que realizaron los Borgia fue el del pintor, inventor y científico Leonardo da Vinci quien diseñó numerosas máquinas de guerra para el ejército papal.


Referencias bibliográficas

Balumbo, G.B. (1990) Ediciones Catedra. S.A.Palermo, Italia.
1088 paginas. Historia de la Literatura Italiana.
Disonible en

Hhttp//sandrayeniber.blogspot.com. Recuperado el 2012.

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